Porcentaje de empleo informal por país
El sector informal está compuesto por diferentes tipos de actividades económicas que se encuentran al margen de las disposiciones legales de los países en donde se desarrollan. Las estimaciones realizadas por los organismos oficiales dedicados a investigar este tema generalmente se centran solo en aquellas actividades informales legales dejando de lado aquellas actividades consideradas ilícitas o ilegales, esto sucede principalmente por la falta de acceso a la información debido a la naturaleza oculta de dichas actividades.
El tema es investigado hace décadas y aún no existe un consenso de como medir o como definir debido a su naturaleza oculta. De acuerdo a los trabajos de Feige (1994), Schneider (2005), Frey y Pommerehne (1984), Smith (1994), Dell’Anno (2016), la economía subterránea, sumergida, oculta o informal, son todas las actividades de producción de bienes y servicios, ya sea legal o ilegal, que no son registradas por las estadísticas oficiales del Producto Interno Bruto.
Por su definición misma la informalidad no es una variable que resulte fácil medir, es prácticamente imposible tener un indicador que permita estimar su tamaño, es por eso por lo que las mediciones más utilizadas se realizan a partir de un conjunto de variables que intervienen en el sector formal y sus interrelaciones para a partir de allí estimar el tamaño de la informalidad. Sin embargo, aislar que parte corresponde a actividades ilícitas es un ejercicio aún más delicado debido a que dichas actividades se desarrollan en mercados más complejos que las de las actividades legales informales.
Es necesario, entonces como punto de partida comprender que implica cada mercado y como opera de manera a iniciar el proceso de aislar el aporte de cada actividad, ya que, la medición de esta es importante para conocer que parte de la producción nacional se encuentra oculta. Considerando que un abogado que cobra dinero de coimas, un traficante de drogas, un vendedor ilegal de armas o un contrabandista es un agente económico que consume y cuyo dinero circula dentro de la economía de la misma forma que un vendedor ambulante o un empresario que no paga el seguro social.
Además, existe una estrecha relación entre la corrupción y el tamaño de la economía informal, por lo tanto, continuar afianzando métodos y estimaciones permitirá avanzar hacia el objetivo de la transparencia tanto económica como social que caracteriza a las sociedades modernas.
Por todas las razones previamente mencionadas, claramente se observa que la economía subterránea, sumergida, o informal es un factor generador de inconvenientes en el desarrollo económico.
Para tener presente que el camino hacia el desarrollo va de la mano de mayores niveles de transparencia en todos los aspectos de la economía tenemos que las evidencias empíricas indican que existe correlación positiva entre la economía informal y los bajos niveles de desarrollo de los distintos países. Según Schneider (2015), en promedio, el grado más alto de economía sumergida en el mundo, es el de la región africana con el 43% del PIB; seguido de América Latina con 36% del PIB, estas dos regiones representan el menor IDH a nivel mundial. Diferente de las regiones de Europa y Oceanía, que poseen una economía sumergida inferior al 20% del PIB.